En 1996, el Ayuntamiento de Xàtiva me encargó la redacción de un proyecto museológico y museográfico con vistas a la futura ampliación del Museo del Almodí de Xàtiva. De las opciones viables en ese momento, se consideró como la más idónea la Casa de la Enseñanza, por estar muy próxima al Almodí, por tener un carácter monumental y por ser propiedad municipal. Dado que la mayoría de los fondos, por procedencia, estaban vinculados a la ciudad, propusimos un único discurso expositivo cronológico, desde la Prehistoria, los íberos, la romanización, etc., dejando en el edificio matriz hasta las colecciones correspondientes a la etapa islámica, y pasando a la nueva instalación los objetos desde la conquista cristiana adelante porque, frente a las anteriores, se podían estudiar con la ayuda de fuentes escritas. Sería, por tanto, un Museo de Historia de la Ciudad.
Como el proyecto museográfico era previo y necesario para la rehabilitación la Casa de la Enseñanza de acuerdo a la finalidad a la que se destinaba, después de consideraciones de naturaleza teórica, pedagógica y otras, el texto se centró, sólo en el citada segunda parte discursiva, que era la que debía ir a la Enseñanza: la distribución de los objetos, según plantas y espacios, la circulación de los visitantes y las instalaciones complementarias, como almacén, biblioteca, administración, dirección y sala de conferencias. No trata, por tanto, del resto de colecciones de épocas anteriores, para las que se requeriría otro proyecto que enlazara con éste. El proyecto arquitectónico de la rehabilitación de la Casa de la Enseñanza se hizo adaptando escaleras, ascensores, accesos, circulación y servicios según estas pautas museográficas. Sin embargo, terminada la obra civil, la instalación de las colecciones se llevó a cabo bastantes años después, a partir de 2012, con criterios distintos a los previstos, por lo que el resultado es diferente.
En esos años de finales de los noventa, los medios electrónicos y audiovisuales estaban en una fase muy elemental, sin adquirir todavía el protagonismo actual. Por eso, leídas casi treinta años después, una parte de las propuestas expositivas quedan obsoletas, pero aún así, nos ha parecido de interés dejar constancia de un proyecto que no se llevó a la práctica.
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In 1996, I was commissioned by Xàtiva’s City Council to develop a museological and museographic project in preparation for the planned expansion of the Almodí Museum. Among the viable options at the time, the Casa de la Enseñanza was deemed the most suitable choice due to its close proximity to the Almodí, its historical and architectural significance, and its municipal ownership. Given that most of the museum’s collection originated from the city itself, we proposed a single chronological exhibition narrative that would trace Xàtiva’s history. The collections belonging to prehistory up to the Islamic era, through the Iberian and Roman periods, would remain housed in the original museum
building, while artifacts from the Christian conquest onward would be relocated to the new space. Unlike the earlier periods, this latter phase could be studied with the support of written sources, which justified its presentation in a dedicated facility. The envisioned institution, therefore, was conceived as the Museum of History of the City.
Since the museographic plan was an essential prerequisite for renovating the Casa de la Enseñanza and adapting it to its new role, the text—after addressing key theoretical, pedagogical, and curatorial considerations—focused exclusively on the design of the new exhibition space. It detailed the arrangement of artifacts across different floors and rooms, the visitor’s itinerary, and the integration of supporting facilities, including storage areas, a library, administrative offices, management spaces, and a conference hall. The project did not address earlier collections, which would have required a separate proposal to connect them with this historical narrative. The architectural renovation of the Casa de la Enseñanza was carried out in accordance with these museographic guidelines, with adjustments to staircases, elevators, access points, visitor flow, and service areas. However, while the construction phase was completed as planned, the installation of the collections did not take place until several years later, starting in 2012. By that time, the curatorial approach had shifted, and the final result diverged significantly from the original project.
At the time of the project’s conception in the late 1990s, digital and audiovisual technologies were still in their infancy and had yet to attain their current prominence. Consequently, nearly thirty years later, some of the exhibition proposals may seem outdated. Nonetheless, we believe it is worthwhile to document a project that, despite not being fully realized as intended, remains an important reflection of Xàtiva’s museological planning process.
REGISTRO
N.º de registro: IN2q3Ehx-2025-04-28T06:33:36.529